Hasta siempre

¿Cuánta vida te cuesta cuando luchas incansablemente contra la corriente por lograr algo creyendo que era la mejor solución? Eso de si amas déjalo libre, es la excusa más grande que alguien con miedo a luchar no intentó. Por el maldito miedo de que vivimos con el complejo de persecución, que la vida me odia, que la suerte nunca está de mi lado. Ese pensamiento mediocre que aunque estoy bastante segura de lo que valgo, siento que estarían mejor sin mi. Y me sigo equivocando, sigo fallando cada vez más. Y no veo ni un poco cerca el final, del maldito dolor constante, de cuanto me cuesta respirar. Porque duele tanto que quema, es algo que no puedo controlar. No me sale ni explicar, éste vacío que habita en mi, por situaciones que yo misma elegí cuando me fui. Y aunque no lo parezca, lo hice por ti. En mi mente entendía que estarías así mejor sin mi. Y hoy miro tus fotos y me doy cuenta que ya no sonríes como la última vez que te vi. Y miro hacia atrás para justificar el error que sé que cometí cuando me fui. Y te veías tan feliz. Y me duele, me mata, me aterra que ya nunca me veas como yo te veo a ti. Como lo más hermoso que me dió la vida y yo hui. Por miedo a verte sufrir y hoy entendí que tu también querías lo mejor para mi. Que decidiste aceptar la distancia creyendo también que lo hacías por mi. Cómo quisiera volver a ver en ti esas ganas de vivir, de verte sonreír. Cómo pido algo que yo tampoco puedo ofrecer porque me perdí. Ese día que me fui, se rompió casi todo de mi. Cada día un poco más, cada día no duele menos. Hasta el día que decidas volver, hasta siempre por ti esperaré.